Los tribunales europeos están paralizando ampliaciones de aeropuertos que no cumplen con el medioambiente, no se ha presentado el nuevo plan directo necesario para una ampliación ni su obligada declaración de impacto medioambiental.
La Unión Europea ha abierto expediente sancionador y exige el cumplimiento de los acuerdos en la anterior ampliación.
La corte suprema alemana limita las operaciones nocturnas y Heathrow tiene el límite de 480.000 operaciones al año.
El Delta del Llobregat ya ha sufrido suficientes distorsiones como para que no sea de nuevo agredido.
Lo que sí se debe ejecutar son los compromisos incumplidos de la última ampliación del aeropuerto.
El parque agrario del Baix Llobregat es una de las joyas de Barcelona que la pandemia y la globalización han puesto de nuevo en valor.
No solo es vital para nuestra correcta alimentación sino imprescindible para nuestra economía, al tratarse de unos recursos alimentarios escasos y de proximidad.
No podemos permitir que este espacio se utilice como monedad de cambio para casinos o hectáreas de cemento para la extensión o para compensaciones del aeropuerto .
En especial cuando el aeropuerto ya dispone de terrenos suficientes.